Se acabó. Ya ha pasado. Un año más ya ha pasado el Viña y no nos ha dado tiempo a disfrutarlo como se merece. Algunos dicen que el Viña debería durar una semana, otros afirman que debería realizarse un fin de semana de cada mes durante todo el año... Pero siendo realistas esto no son más que utopías irrealizables; sueños que de ser reales acabarían con toda la juventud de este país. El Viña es como es. Y es cuando es. Y dura lo que dura. Y es donde es. Y lo hacemos los que lo hacemos. El Viña es así y hay que saber disfrutarlo. Además, no hemos salido de una para meternos en otra: el Cultura Urbana'06 está a la vuelta de la esquina.
El tiempo acompañó. Y el público respondió. Cerca de 80.000 personas pudieron disfrutar de los conciertos y más de 110.000 "desfasaron" en los aledaños del Auditorio Municipal de Villarrobledo. Todo un éxito. Y es que el Viña crece cada año. Y cada año nos sorprende más y más con una organización impecable, a pesar de las polémicas y de los ataques de asociaciones que, quizá, se deberían preocupar más de otros asuntos. En fin.
En lo que a rap se refiere (que es lo que a los lectores de Madrid Hip Hop nos preocupa) hay que destacar algunas cosas. En primer lugar, parece mentira que algunos se quejen de que la cultura hip hop esté desatendida. La culpa es nuestra, de los b-boys, porque lo que no se entiende es que, por ejemplo, el domingo a las 4 de la tarde, la carpa
Sennheiser en pleno conciertazo de Demo esté casi vacía y unos metros más allá esté a reventar la carpa Matarile con la Banda Bassoti. El sol, el polvo y la resaca afectan a todos por igual, sin embargo, repito que una carpa estaba llena y la otra vacía. Sin comentarios.
En cuanto a la puesta en escena de "los grandes", es decir, Violadores del Verso y SFDK, simplemente no se podía entrar. ¿Qué está ocurriendo en este país para que tantos y tantos b-boys nos quedaramos fuera de estos conciertos? Cerca de 30.000 almas abarrotaban la
Sennheiser en ambos directos, pero los b-boys no suponían más allá de un 10% del total del público. Deberíamos reflexionar un poco acerca de lo que estamos viviendo en la actualidad. El rap siempre ha sido minoritario, y ese es uno de los fuertes de nuestra cultura. Algunos hablan de profanación, de intrusismo, de
pasteleo... otros hablan de apertura a la masa. Que cada cual saque sus propias conclusiones.
Sin duda, el momento
climax de la carpa de rap se vivió el domingo a las 3 de la mañana con
Rapsusklei. Sencillamente descomunal. No había tanta gente como en los conciertos mencionados anteriormente, pero el 100% del público eran b-boys o rastafaris. Rapsus desplegó todo su arsenal acompañado por su inseparable
Hazhe (el de Zaragoza, ojo que nadie se confunda) y por Karty Er Nene. Un lujo para los oídos y para la vista. Una hora que se pasó volando. Simplemente no hay palabras para describir el susodicho directo.
Y así acabó, en lo musical, el Viña. Muchos fuimos los que echamos de menos una buena sesión de DJ's de dos o tres horas para cerrar esas noches de desenfreno, pero la organización este año prefirió que no fuera así. Sin duda un error que esperemos el año que viene no se produzca.
En definitiva, el Viña nunca defrauda. Hay que poner ya la mira en el del año 2007 que seguro que también viene fuerte. A los ausentes, ya sabéis: no faltéis que no sabéis lo que os estáis perdiendo. A los fieles: tranquilos, ya sólo quedan algo más de 50 semanas para el siguiente Viña. La espera de siempre. La rutina de siempre. Pero vosotros sí podéis decir que habéis "vivido"·
Direktor (El Qubo)
